El mayor reto al que se enfrenta la agricultura es aumentar la producción de alimentos y al mismo tiempo garantizar el menor impacto sobre el medio ambiente. Con este objetivo, un grupo multidisciplinario del Instituto de Fisiología y Recursos Fitogenéticos (IFRGV) y el Instituto de Patología Vegetal (IPAVE) probaron diferentes fertilizantes líquidos a base de nanopartículas minerales de alta pureza en cultivos hortícolas y suelos marginales de Hernando, en la provincia de cordoba.
La nanotecnología es la ciencia que estudia las partículas pequeñas. Su uso en agricultura consiste en la fertilización con diferentes formulaciones de nanopartículas minerales de alta pureza. Se vende como producto líquido y tiene la ventaja de que requiere una dosis muy pequeña.
Tipos de suelos para cultivo
Según estas características descritas, los suelos agrícolas se pueden clasificar de varias formas. Si nos fijamos en la clasificación por texturas, tenemos suelos arenosos, arcillosos y limosos. Si queremos clasificar los suelos según sus propiedades químicas, tenemos suelos ácidos, neutros o alcalinos.
Los suelos arcillosos son aquellos que tienen una mayor presencia de arcilla que el resto de los componentes del suelo, como arena o limo. Son suelos que pueden retener grandes cantidades de agua, pero que en ocasiones tienen una densidad muy alta, lo que impide que el agua se filtre y provoca el estancamiento. Generalmente son suelos rojizos y fáciles de identificar porque cuando están mojados tienden a inundarse fácilmente y cuando están secos tienden a agrietarse. Estas características los convierten en suelos difíciles de trabajar, ya que cuando se humedecen se pegan a las herramientas y cuando se secan se forman terrones compactos
¿Qué pH se considera un suelo ácido?
El pH es una medida de cuán ácido o alcalino es su suelo: 7 es neutral; los números más bajos son más ácidos y los números más altos son más alcalinos.
La escala de pH es logarítmica, lo que significa que un cambio de 1 unidad en el pH es un cambio de 10X en acidez o alcalinidad. Un suelo con un pH de 6 es 10 veces más ácido que un suelo con un pH de 7; un pH de 5 es 100 veces más ácido que un pH de 7. Por lo tanto, es importante conocer el pH natural de la tierra de su jardín (el pH que puede esperar en su propiedad) y si una planta en particular requiere tierra ácida o neutra. . La única forma de saber con certeza tu pH es comprar un kit de prueba en un centro de jardinería o en línea, o enviar tu suelo a un laboratorio de análisis de suelos para obtener un resultado oficial.